El Bautismo en la Iglesia Metodista Unida: Por la gracia de Dios
Mientras conmemoramos el bautismo de Jesús esta semana, me gustaría invitarlos a reflexionar sobre cómo nuestra tradición metodista entiende este sacramento.
Comencemos afirmando que los Sacramentos son la expresión de la Gracia de Dios y su amor incondicional. Por tanto, estos son regalos inmerecidos que Dios da a la humanidad. Los sacramentos se diferencian de las ordenanzas porque los sacramentos son acciones de Dios (dones), pero las ordenanzas son acciones humanas (obediencia). Este aspecto diferencia la comprensión metodista del bautismo de otros grupos cristianos, por ejemplo.
Por lo tanto, la iglesia metodista reconoce sólo dos Sacramentos: el Bautismo y la Sagrada Comunión. ¿Por qué dos Sacramentos? Porque Jesús participó de estos y también nos ordenó hacer lo mismo.
El bautismo es una señal de identidad de que somos hijos de Dios, somos cristianos y hemos sido iniciados en la Iglesia cristiana. El bautismo también trae sentido de pertenencia a la comunidad de Dios.
¿Por qué bautizamos a los niños? Entre otras razones, porque el apóstol Pablo y el libro de los Hechos hablan del bautismo de familias enteras. Dios ofrece a la persona su Gracia Preveniente y por eso las personas reciben el bautismo, siento esta es una celebración y reconocimiento de dicha Gracia dada por Dios, un misterio en el que ninguna voluntad humana intervendrá. Me permito repetirlo nuevamente, como reconocemos el bautismo como un sacramento, y no como una ordenanza, bautizamos niños.
¿En qué momento aceptamos esta Gracia de Dios? Todos tenemos la libertad de aceptar o rechazar este regalo de Dios. La confirmación es el momento en el que reafirmamos nuestro bautismo, cuando declaramos que hemos aceptado el don inmerecido de Dios.
Sin embargo, aunque bautizamos a niños, en el caso que haya alguna persona que en la adultez no ha sido bautizada aún, puede ser bautizada siendo adulta. Los metodistas unidos no re bautizamos a las personas. Una vez que alguien ha sido bautizado en una Iglesia cristiana en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, esa persona es bautizada para siempre y así es reconocida por la Iglesia Metodista Unida.
¿Bautizamos sólo vertiendo agua sobre la frente? La Iglesia Metodista Unida acepta el bautismo por inmersión (inmersión completa en agua), aspersión (lo más común) o verter agua sobre la cabeza de la persona.
Este domingo tendremos el Servicio Congregacional de Reafirmación del Pacto Bautismal en Trinity. ¡Celebremos juntos la Gracia de Dios que nos ha sido dada!
Cordialmente,
Pr. David Gaitan